31 medallas. Éste fue el botín alcanzado por la delegación española hace cinco años en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro. Y éste es la cifra que se pretende superar en los Juegos de Tokio. Dos de las apuestas más sólidas y seguras para que España regrese de Japón con un buen acopio de éxitos son Ricardo Ten y Kim López. Los podios de los dos embajadores FER aparecen en todas las quinielas. Aunque el deporte no es una ciencia exacta y aunque las competiciones resulten imprevisibles, todo lo que no sea que Ricardo y Kim toquen metal representará una enorme sorpresa. En ambos casos, los precedentes invitan muy claramente al optimismo. Ahora, sólo falta que los esperanzadores pronósticos se plasmen en realidades.
Sobre ruedas. Así puede llegar el nuevo hito de Ricardo Ten en unos Juegos Paralímpicos. Hasta el momento, el longevo y casi incomparable deportista valenciano, de 46 años, ha estado presente en cinco Juegos. Siempre, en natación, deporte en el que logró siete medallas: cuatro individuales y tres en relevos. Los cuatro metales individuales, todos ellos en los 100m braza SB4, son: plata en Atlanta 96, oro en Sídney 2000, oro en Pekín 2008 y bronce en Río 2016. En 2017, abandonó la piscina y se introdujo en el mundo del ciclismo, donde ha sido campeón del mundo en cuatro ocasiones. Dos veces sobre el velódromo, en la prueba de persecución individual de 3 km, años 2018 y 2019. Y otras dos, sobre la carretera, en la prueba en línea de la edición de 2019, y en la contrarreloj individual del Campeonato del Mundo de 2021, disputado hace pocas semanas en Portugal.
De cara a Tokio, Ricardo Ten centra sus principales opciones de éxito en la pista, en la persecución individual de 3 km. Durante los últimos años, el deportista FER siempre ha defendido que su gran baza pasa por el velódromo, donde, en principio, tendrá como gran rival por el oro es el chino Li Zhangyu. Con respecto a la ruta, Ricardo no descarta ascender al podio. Sobre todo, en la prueba de contrarreloj. Más difícil es ocupar las plazas de honor en la prueba de fondo en carretera, puesto que, en los Juegos Paralímpicos, compiten conjuntamente, en una misma carrera, los MC1, los MC2 y los MC3. No obstante, cabe recordar que Ten ya fue campeón universal en la prueba del Mundial de 2019 tras ser el mejor de todos los participantes, incluyendo las tres clases de discapacidad.
Por su parte, Kim López (lanzamiento de peso F12) se dispone a defender en Tokio el oro alcanzado en los Juegos Paralímpicos de Río 2016. A partir de aquel momento, el atleta de Silla se mantuvo en la vanguardia internacional, pero sin la brillantez deseada. Por ejemplo, fue en bronce en el Mundial de Londres 2017, conquistó la plata en el Europeo de Berlín 2018 y obtuvo la plata en el Mundial de Dubái 2019. Y en todos estos certámenes, con marcas más bien discretas, lejos de su potencial. También hay que tener en cuenta que Kim López convive, desde abril de 2018, con una seria lesión. En aquel momento, hace ahora casi 40 meses, el deportista FER sufrió una caída en pleno entrenamiento que le provocó la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. En ese momento, a dos años vista de los Juegos y con un Mundial en 2019, decidió no operarse.
Sin embargo, en 2021, ha regresado la versión más potente y exuberante de Kim López. En febrero, en Motril, Granada, el lanzador FER proyectó el peso hasta los 17,22m, un registro asombroso que suponía récord del mundo, pero que no fue homologado por no notificar la presencia en este evento en tiempo y forma. Poco después, a principios de junio, el atleta valenciano se proclamaba, nuevamente, campeón de Europa. Además, esta vez sí, con plusmarca universal incluida, 17,02m, cifra que pulverizaba los 16,69m que, hasta ese momento, ostentaba como récord mundial el ucraniano Danyliuk. Y hace menos de dos meses, el pasado 7 de julio, durante un control federativo en Gandía, ciudad en la que se entrena diariamente bajo la supervisión y coordinación de Juan Vicente Escolano, volvía a hacer otro imponente lanzamiento de 17,10m, marca que, en todo caso, aún no ha sido homologada ni parece que vaya a serlo. Con todo ello, Kim López no sólo apunta al podio. El oro es más que factible.
