El judo, el triatlón, la gimnasia artística y la natación. Éstos han sido los cuatro ejes del reciente fin de semana deportivo para el Proyecto FER. Un capítulo que no ha ofrecido un balance deslumbrante. Tampoco se esperaba. No obstante, el tono general ha resultado positivo y satisfactorio. Sobre todo, por el judo, disciplina que ha concedido dos éxitos. El más llamativo lo firmaba Pedro Gómez Llorens.
El joven deportista de Castalla (de 18 años, junior de segundo y penúltimo año) se adjudicaba la Súper Copa de España absoluta celebrada en Pamplona. Pedro ha tenido que esperar a la décima competición del año para saborear la principal alegría de etapa sinuosa. El alicantino, considerado como una de las grandes esperanzas de futuro del judo valenciano, ha afrontado una especie de travesía por el desierto. En 2018, acusó el salto de categoría (de cadete a junior). En 2019, ha pagado el cambio de peso (de menos 55 kg a menos 60 kg). Ha necesitado tiempo y paciencia. Poco a poco, empieza a resurgir. En 2020, en su último año como junior, afrontará una temporada decisiva.
El segundo hito del fin de semana aportado por el judo correspondía a otra joven deportista. Adriana Rodríguez Salvador, cadete de segundo y penúltimo año, conseguía la medalla de bronce en la Súper Copa de España de la citada categoría de edad disputada en Vigo. Es el tercer metal obtenido por Adriana en este 2019. Los otros dos, también de bronce, llegaron en el Campeonato de España, desarrollado en Valencia durante el pasado mes de abril, y en la Súper Copa de España junior de Valencia, celebrada a finales de septiembre.
Mientras, el triatlón español vivía su gran fiesta anual el pasado sábado en Pontevedra gracias al PROTOUR, competición de reciente creación y que reunía a los mejores 40 triatletas nacionales del momento. Entre ellos, figuras de relumbrón, como Mario Mola, Javier Gómez Noya o Fernando Alarza. Y entre ellos, Roberto Sánchez Mantecón y Javier Lluch Pérez, componentes del Proyecto FER. Los 40 deportistas presentes en el evento se distribuyeron en dos semifinales, con 20 competidores en cada una de ellas. Los 10 primeros de cada serie, desarrollada en distancia super esprint, se clasificaban para la gran final.
En la primera semifinal, Roberto acabó tercero. En la segunda, Javier fue cuarto. Ya en la final, también con la modalidad de super esprint, las tres primeras plazas correspondieron a Mola (oro), Serrat (plata) y Gómez Noya (bronce). Los triatletas valencianos ofrecieron grandes prestaciones. Roberto entró quinto. Y Javier, octavo. Ambos, en suma, ratificaron sus enormes proyecciones. Constituyen dos de las grandes ilusiones del deporte de la Comunitat Valenciana y representan el relevo generacional del triatlón español.
Ya en clave internacional, Néstor Abad puso el viernes el punto final al Campeonato del Mundo de gimnasia artística en Stuttgart. El de Alcoi fue uno de los 24 deportistas que disputaron la final individual del all around o concurso completo. Estar entre los 24 finalistas por segundo Mundial consecutivo ya era un éxito. Néstor acabó en la 22ª plaza. No estuvo a su mejor nivel. No pudo repetir la espectacular undécima plaza lograda en Doha 2018. No obstante, el gimnasta FER ha demostrado solidez y fiabilidad. Y, lo más importante, ha contribuido a que el equipo masculino se haya asegurado su presencia en los Juegos Olímpicos de Tokio del próximo verano.
Precisamente, el billete olímpico es el gran sueño de Lidón Muñoz del Campo. Durante los próximos siete meses, la nadadora castellonense dispone de tres oportunidades para lograr el deseado pasaporte. La primera llegará a mediados de diciembre, en Ámsterdam. Antes, Lidón está disputando las pruebas de la Liga Internacional, prestigioso evento internacional de reciente nacimiento y que ya ha consumido dos jornadas.
Este pasado fin de semana, la nadadora FER compitió en Nápoles. Volvió a defender al Aqua Centurions de Roma. Hizo los 50m y los 100m libre. De un total de 8 participantes en cada distancia, Lidón fue quinta y séptima, respectivamente. Además, con marcas más que respetables. Conseguir la clasificación olímpica en natación es un reto durísimo. Pero la castellonense no se resigna. Ni mucho menos.