El Grand Slam de Budapest, torneo celebrado la pasada semana en la capital húngara, representó la reactivación del judo a nivel internacional. Una reanimación breve, pero intensa. El testigo lo toman ahora tres Campeonatos de Europa. Si ningún contratiempo lo impide, todos ellos se van a disputar durante el mes de noviembre: el junior, del 4 al 6 en Croacia; el sub-23, del 9 al 10 también en Croacia; el absoluto, por último, del 19 al 21 en Praga.
Las primeras deportistas FER en participar en estos eventos continentales serán Mireia Rodríguez y Marina Castelló. Ambas competirán en el Europeo junior. Mireia (20 años, Castalla, Alicante) se despide de esta categoría de edad. Curiosamente, no ha podido disputar este torneo tan importante ni en 2018 ni en 2019. En ambos casos, por culpa de las lesiones. Por su parte, Marina (18 años, Alicante) se encuentra inmersa en su primera temporada como junior, en la que debutó a lo grande gracias a la medalla de oro lograda en el Campeonato de España, certamen celebrado a finales del mes de febrero en Alcalá de Henares. A pocas jornadas de afrontar un gran desafío deportivo, así se expresan ambas yudocas alicantinas.
Mireia Rodríguez: “Me encuentro bien, pero no es lo mismo entrenar que competir”
Máxima. Prácticamente insuperable. No pude disputar este importantísimo evento en los dos pasados años. Por tanto, a pesar de las complicadas circunstancias en las que nos encontramos, estoy muy ilusionada y deseosa de volver a competir. Quiero poner un broche de oro a mi etapa como junior
Claro que podemos soñar. No obstante, no quiero auto presionarme en exceso. Quiero estar concentrada y, sobre todo, disfrutar de la experiencia. Si lo logro, estoy convencida de que puede llegar un buen resultado.
En principio, no. Los últimos entrenamientos han sido satisfactorios. También es cierto que no es lo mismo un entrenamiento que una competición del nivel de un Europeo junior. Físicamente, me encuentro bien. Con todo, después de tantos meses sin competir, las dudas y las incógnitas son inevitables. Habrá que esperar a pisar el tatami en Croacia.
Marina Castelló: “Pese a que soy debutante y de las más jóvenes, voy a este evento con la máxima exigencia”
Puede ser. Yo debuto en un Europeo junior y, por tanto, no tengo la presión que pueden sufrir otras competidoras más veteranas. Pero voy a este evento con la máxima ambición, con la máxima exigencia, con ganas de demostrar todo mi potencial, y con el objetivo de plasmar todo lo entrenado durante todo este tiempo sin competir.
No es fácil dar una respuesta concreta. Cuanto menos, me gustaría ganar un combate, pero no quiero marcarme nada concreto de antemano. Vamos a ver de qué soy capaz. Gane o pierda el primer combate, llegue más o menos lejos, para mí, un buen resultado sería volverme de Croacia con una sensación positiva y con la convicción de que soy competitiva de cara al futuro.
Me siento preparada, física y mentalmente. Cuando retomé los entrenamientos después del confinamiento, he ido aumentando mi rendimiento con el paso de las semanas. Dicho esto, tengo ciertas reservas y no sé si en la competición acabaré acusando este parón tan largo.
