El judo. Julia Figueroa y Ana Pérez Box. Ésta es la primera modalidad y las primeras deportistas del Proyecto FER en comparecer durante el recién estrenado 2021. Ambas judocas están preparadas para afrontar el Master, un evento que, en esta ocasión, se celebra en Qatar y a principios del nuevo curso (históricamente, se disputa en diciembre). El Master es, después de los Juegos Olímpicos y el Campeonato del Mundo, el torneo que más puntos reparte de cara al ranking internacional. Es decir, en esta edición, a tan sólo medio año de los Juegos de Tokio, adquiere una enorme relevancia. Como es habitual, reúne a los y las 36 mejores del mundo en cada categoría de peso. Dadas las circunstancias, y tras el desierto de los últimos meses propiciado por la pandemia del covid-19, el acontecimiento se presenta apasionante.
La presencia de Julia Figueroa (categoría de peso de menos 48 kg) en este Master de Qatar es casi milagrosa. La judoca cordobesa, pero valenciana de adopción y, sobre todo, de formación deportiva, se vio obligada a pasar por el quirófano el pasado 10 de septiembre. Fue intervenida del hombro izquierdo. La dolencia le impedía, ya no sólo entrenar, sino hacer vida normal. “En realidad, sufría molestias desde los 16 años, pero últimamente, me afectaba al día a día. Y es curioso, había veces en que me dolía mucho más al andar, al montar en bicicleta o al beber agua que haciendo judo y llevando el cuerpo al límite”, rememora. El tiempo estimado de baja oscilaba entre los cuatro y los seis meses. Finalmente, han sido cuatro. La recuperación ha sido vertiginosa. “Si he optado por ir, es porque me encuentro con buenas sensaciones y porque me veo con opciones de competir al máximo nivel. Hay mucho en juego. Las medallas te dan muchos puntos de cara a Tokio 2020. Por eso, me he decidido”, apunta Julia.
En 2020, la deportista FER sólo disputó un torneo. En febrero, antes de que la pandemia irrumpiera con toda su fuerza y paralizara el deporte a nivel mundial, alcanzó la medalla de bronce en el prestigioso Grand Slam de Dusseldorf. A finales de año, y a causa de la operación del hombro izquierdo, no pudo disputar los dos eventos con los que se reactivó el judo: ni el Grand Slam de Budapest, ni el Campeonato de Europa en Praga. Por tanto, 11 meses después de su última comparecencia, y con el billete olímpico en juego, es fácil imaginar la gran motivación de Figueroa, de 29 años, quien ha disputado este Master en tres ocasiones (años 2016, 2018 y 2019). Su mejor resultado fue la medalla de bronce alcanzada en la edición de 2016, desarrollada en la ciudad mexicana de Guadalajara. Actualmente, Julia ocupa la cuarta plaza del ranking mundial en menos de 48 kg. La madrileña Laura Martínez, también aspirante al pasaporte olímpico, es novena.
Por su parte, Ana Pérez Box afronta este evento por tercera vez. Con anterioridad, obtuvo dos séptimas plazas: en Qingdao, en 2017; en Guangzhou, en 2018. La judoca alicantina, de 25 años, sí pudo disputar, a finales del pasado mes de noviembre, el Campeonato de Europa en Praga. Rozó el pase a la final y acarició la medalla de bronce, pero finalmente tuvo que conformarse con la quinta plaza. También Ana tiene el pase a los Juegos muy encaminado. Es séptima en la clasificación mundial de menos 52 kg. A diferencia de Julia Figueroa, no tiene tanta competencia en suelo nacional.