La falta de costumbre siempre conlleva la excepcionalidad. Por poco usual, en la medalla de plata conseguida por Jorge Ureña en el heptatlon del Europeo de atletismo en pista cubierta, hay mucho de extraordinario. Un combinero español, subcampeón continental. Solo el enunciado impacta. No obstante, el éxito se vislumbrada desde que el deportista de Onil estableciera durante el pasado mes de enero en Praga la mejor marca mundial del año con unos asombrosos 6.249 puntos. Un soberbio registro equivalente a cifras tan fascinantes como lanzar el peso a más de 21 metros, llevar el triple salto hasta cerca de los 17,20m, cubrir los 100m en 10.05 y los 200m en 20,21, o completar los 1.500m en torno a los 3:35. En Belgrado, en un concurso de un altísimo nivel con récord de Europa incluido, el deportista FER se quedó en los 6.227 puntos, suma más que suficiente para hacer historia y para declarar inaugurada una etapa en la que Ureña, todavía con 23 años, se convierta en un referente, ya no solo del atletismo, sino de todo el deporte español. Pese a todo, Jorge destila una normalidad y una humildad apabullantes.
Antes que nada, enhorabuena. Subcampeón de Europa de heptathlon. ¿Ya lo has asumido?
Todavía no del todo. Han pasado casi dos días y sigo en una nube. Me costará digerirlo. Pero sobre todo, muy contento con el logro y con ganas de ratificar mi crecimiento en el aire libre.
Mostraste una gran regularidad en todo el concurso. ¿Qué nota te pones a ti mismo?
Un 9.5. La verdad es que hice una gran competición. Lástima de no estar a mi nivel habitual en la longitud, pero me resentí de unas molestias en el pubis, y no salté con plena confianza y seguridad. Pero por el contrario, estoy muy satisfecho con los 60m lisos, con los 60m vallas, con la pértiga…
Aunque el éxito es muy meritorio, la marca de 6.249 puntos alcanzada a finales de enero en la Reunión Internacional de Praga te convertía en uno de los grandes favoritos en este Europeo de Belgrado. ¿Cómo fueron los días previos y como gestionaste la cierta presión que te rodeaba?
Con plena normalidad. En los días previos, intenté abstraerme al máximo. Afronté el Europeo como cualquier otra competición. Sabía que aspiraba al podio; por ello, solo pensaba en rendir al máximo nivel y en estar plenamente concentrado. Y lo conseguí. En ningún momento, acusé los nervios.
¿Eres consciente de que, desde ya, pasas a convertirte, con tan solo 23 años, en uno de los principales protagonistas del deporte español y de que, a partir de ahora, cada comparecencia tuya va a causar una gran expectación?
Soy consciente de que he logrado un éxito importante, pero nada más. Todavía soy muy joven, he de seguir haciendo lo mismo que hasta ahora: disfrutar de mi deporte, entrenar a tope cada día y seguir mejorando. Solo así podré repetir en un futuro logros como la plata de Belgrado.
¿Qué se puede esperar de Jorge Ureña en el futuro? ¿A que podría equivaler este oro continental bajo techo al decatlón al aire libre del próximo Mundial de Londres?
Es difícil hacer una traslación del heptatlon al decatlón. Sobre todo, porque en el decatlón hay tres pruebas de lanzamientos, que es mi punto débil y en el que he de seguir mejorando. Pero si me preguntas por mi objetivo en el Campeonato del Mundo al aire libre de Londres, te diré que quiero ser finalista, acabar entre los 8 primeros.
Ahora que ya te conviertes en una figura del atletismo nacional e internacional, ¿te planteas cambiar de aires y abandonar tu Onil natal? ¿O de Onil no te mueve nada ni nadie?
De momento, no me lo planteo. Onil lo es todo para mí. De momento, va todo muy bien. Por tanto, seguiré en mi tierra y rodeado de mi gente.