El reloj y el calendario siguen avanzando de forma inexorable. Los Juegos Olímpicos de París se acercan a velocidad de vértigo. Cada vez, falta menos para que llegue el gran momento. En paralelo, se suceden los últimos ensayos de calidad, los últimos exámenes preparatorios. Uno de estos eventos para medir estados de forma y sensaciones es el Campeonato de Europa de natación en aguas abiertas, certamen que se celebra en Belgrado desde el 12 hasta el 16 de junio. Entre las participantes, Ángela Martínez Guillén (Elche, 20 años). La deportista FER se dispone a disputar un nuevo maratón. Afrontará tres pruebas. Las dos individuales, de 10km y 5 km, y la de relevos mixtos (Ángela será una de las cuatro componentes del relevo español; es decir, cubrirá 1.250 metros).
La nadadora ilicitana se presenta pletórica en este certamen continental. De momento, su 2024 está resultando de ensueño. A la obtención del billete olímpico, conseguido a principios de febrero en el Mundial de Doha, hay que unir tres actuaciones inconmensurables. En marzo, se colgó la medalla de bronce en la Copa del Mundo disputada en Egipto. Se quedó a tan sólo tres segundos de la alemana Leonie Beck, campeona del mundo en Fukuoka 2023, y a apenas un segundo de la húngara Bettina Fabian, o en el Mundial junior de 2022. En mayo, se proclamó doble campeona de España, en los 10 y en los 5 km, y pudo superar a María de Valdés y a Paula Otero. Por último, hace pocas semanas, el pasado sábado 18 de mayo, se adjudicó la primera prueba de la Copa de Europa 2024, celebrada en Piombino, Italia. Ganó a rivales tan poderosas como la brasileña Ana Marcela Cunha, a la francesa Caroline Jouisse, a la montenegrina Lissa Pou, a la francesa Oceane Cassignol o a la japonesa Airi Ebina.
Aunque nunca hay que bajar la guardia, porque los éxitos son efímeros y la competencia es durísima, reconozco que sí, que me encuentro muy bien. Los buenos resultados de las últimas competiciones me han aportado mucha confianza, optimismo y seguridad. Estoy con grandes sensaciones.
Si tengo que elegir uno de los tres, me quedo con el bronce de Egipto. Sobre todo, porque la participación era de gran nivel.
La verdad, no lo sé, pero imagino que ya no soy tan desconocida como hace unos meses.
Hemos contemplado el Campeonato de Europa como un ensayo para preparar los Juegos. Obviamente, voy a buscar el mejor resultado. Y, si puedo subirme al podio, mucho mejor, pero no ha habido una preparación específica. La planificación se ha enfocado y sigue enfocada para llegar a París en óptimas condiciones.
De cara a los Juegos, quiero hacer una preparación perfecta. Éste es el principal objetivo. No voy a negar que, después de los últimos éxitos internacionales, la opción de conseguir un diploma no es ninguna utopía, pero el tiempo lo dirá. El jueves 8 de agosto, la carrera nos pondrá en nuestro sitio. Ni quiero ni debo perder energías pensado a largo plazo.
Ya no sólo en los metros finales, sino en la última vuelta, compuesta por 1.600 metros. A diferencia de muchas rivales, noto que voy a más, que acelero el ritmo, que gano posiciones, y que conservo fuerza y potencia para el momento de la verdad.
Ninguna competición. Todo serán concentraciones. Primero, una semana en Mataró; después, dos semanas en Málaga; y, por último, el último mes antes de viajar a París, estancia en Sierra Nevada.
Calendario
- Miércoles 12 de junio, 10 km
- Jueves 13 de junio, 5 km
- Sábado 15 de junio, Prueba del relevo mixto