Cinco grandes eventos, todos ellos internacionales, componían la agenda del Proyecto FER durante este reciente fin de semana. Y en 3 de ellos, las actuaciones de los deportistas FER se han contado por éxitos. Un balance casi perfecto. Casi impecable. Una de las grandes conquistas logradas por los embajadores del equipo FER en las últimas horas ha sido la fantástica medalla de oro alcanzada por el taekwondista Raúl Martínez en el reputado Grand Prix de Manchester. El hito representa, sin duda, el principal éxito del deportista ilicitano en su trayectoria deportiva. Raúl se impuso a cinco rivales de extraordinario nivel; entre ellos, a un contrincante ruso que, el pasado mes de mayo, se proclamó campeón de Europa. Esta magistral actuación no solo le concede un prestigioso oro; además, le reporta unos valiosísimos puntos en su carrera hacia los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Un destino todavía lejano, pero en absoluto descartable. También en Manchester competían Daniel Ros y Blanca Palmer. El primero cayó en el primer cruce. La segunda ganó el primer combate, pero fue derrotada acto seguido, en los octavos de final.
La nómina de alegrías también se localizaba en Israel. Uno de los mejores componentes del Proyecto FER en 2018 añadía un nuevo triunfo a un ejercicio especialmente brillante. Roberto Sánchez Mantecón se adjudicaba la medalla de bronce en el Campeonato de Europa sub’23 de triatlón. El tercer mejor participante de los 45 competidores en el certamen continental. Un bronce no apto para cardíacos. Resuelto al sprint después de casi 2 horas de esfuerzo. A dos segundos de la plata, a dos segundos de quedar fuera del podio. En cualquier caso, el triatleta valenciano rubricó este pasado sábado una temporada para enmarcar. En un año, ha pasado de la plaza 85ª a la 50ª en el ranking internacional. El próximo fin de semana, Sánchez Mantecón pondrá punto final a un frenético curso con la presencia en la Copa de Europa distancia sprint de Funchal.
El judo también se ha reivindicado durante las últimas jornadas. Dos integrantes del Proyecto FER lograban sendos podios en la European Cup de Málaga, un evento internacional de rango inferior a un Grand Slam, a un Gran Prix y a una Copa del Mundo. Por una parte, Isabel Puche, ya recuperada de unas molestias en la rodilla sufridas durante las últimas semanas, conseguía una meritoria medalla de bronce. No obstante, la gran noticia procedente del tatami andaluz la firmaba Alberto Varela, judoca alcireño de 19 años. Avalado por Sugoi Uriarte, su entrenador y voz más que autorizada, Alberto Varela, por unas u otras razones, no había podido exhibir su teórico potencial en los últimos dos años. La dinámica negativa se rompió el pasado sábado en Málaga, donde protagonizaba toda una irrupción y obtenía la medalla de plata. Un logro muy meritorio, habida cuenta de que el judoca FER todavía está en etapa junior y ascendió al podio en un torneo de categoría absoluta. En resumen, toda una inyección de confianza y moral a solo 2 semanas de afrontar el Europeo sub 23 en Hungría.
El fin de semana se completaba con otros dos grandes eventos. En primer lugar, el ciclismo en pista ha ofrecido la primera Copa del Mundo de la nueva temporada. El escenario, Francia. El castellonense Sebastián Mora afrontaba dos pruebas. La más importante, la madison, modalidad olímpica y en la que se compite por parejas. Mora y su compañero, Albert Torres, ocupaban la quinta plaza de 16 dúos participantes. El de Vila-real y el balear no ascendían al podio, pero demostraban que siguen en la vanguardia internacional y que, de no mediar ningún contratiempo, estarán en los Juegos de Tokio. Por su parte, en la velocidad por equipos (prueba olímpica en la que los conjuntos están formados por 3 componentes), el combinado nacional, con Alejandro Martínez Chorro como uno de sus tres integrantes, era undécimo de 16 tríos.
Por último, en vóley playa, Liliana Fernández disputaba esta pasada semana el World Tour 4 Estrellas de Las Vegas, Estados Unidos, el primer torneo puntuable de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Con poco entrenamiento previo a causa de las molestias que Liliana todavía arrastraba en una de sus manos, la alicantina y su compañera, la madrileña Elsa Baquerizo, estuvieron correctas. Concluyeron la fase de grupos con una victoria y una derrota, un balance que les obligó a jugar un cruce de repesca previo a los octavos de final. Lo salvaron. Ya en los octavos, perdieron con claridad ante una pareja canadiense que, a la postre, se adjudicó el oro. Al final, novenas. Liliana no volverá a comparecer en un torneo oficial hasta el próximo mes de enero. Será en Holanda.