Recta final. Cuenta atrás. Cada vez, son menos los deportes que todavía no han cerrado sus procesos clasificatorios hacia los Juegos de París. Una de las modalidades que aún no ha resuelto todas las incógnitas es el vóley playa. Sin embargo, la intriga tiene fecha de caducidad. Mejor dicho, fechas. La primera es el 9 de junio, jornada en la que se conocerán las 34 parejas (17 masculinas,17 femeninas) que obtienen el pasaporte olímpico vía ranking; es decir, atendiendo a los resultados conseguidos y a la regularidad acreditada desde enero de 2023. La segunda y última es el 16 de junio, día en que concluirá la Nations Cup, la ventana habilitada para que cada continente coloque en los Juegos a dos parejas (una masculina y una femenina). En el caso del continente europeo, la fase final se desarrolla en Letonia entre el 13 y el 16 de junio.
Sólo dos torneos quedan por disputarse antes de la clausura del ranking olímpico. El penúltimo se celebra esta semana, entre el 30 de mayo y el 2 de junio: es el Pro Tour Challenge de Jablonki, Polonia. El último está previsto del 5 al 9 de junio, el Pro Tour Élite 16 en Ostrava, República checa. A efectos del deporte valenciano y del Proyecto FER, hay dos escenarios diferentes. Por una parte, el longevo Pablo Herrera (Castelló de la Plana, 41 años) tiene el pasaporte olímpico virtualmente asegurado. Sólo falta la oficialidad. Para el incombustible deportista castellonense, resultaron vitales los dos podios logrados en 2023: el oro en el Challenge de La Paz, México, y la plata alcanzada en el Challenge de Goa, India. En 2024, ha conseguido tres quintas plazas: en los Challenge de Saquarema, Brasil, y Guadalajara, México; y en el Élite 16 de Tepic, México.
La tranquilidad de Pablo Herrera contrasta con la realidad en la que se encuentran Liliana Fernández y Paula Soria. A falta de los dos torneos puntuables, las jugadoras alicantinas están en el filo, en el límite entre quedarse fuera o entrar vía ranking. En este momento, las componentes del Proyecto FER no irían a los Juegos, pero acarician el billete. Salvo cambios drásticos y poco previsibles, hay 16 billetes asignados. Es decir, sólo queda disponible un pasaporte. Un único comodín y seis parejas femeninas para atraparlo. Uno de esos seis equipos es el formado por Liliana y Paula. En una clasificación ‘parcial’ entre los seis candidatos, las deportistas FER ocupan la segunda posición, pero muy cerca de las primeras, las canadienses Pavan y Mcban, que son, ahora mismo, las que se llevarían el 17º y último billete de París mediante la ventana del ranking.
Liliana y Paula han llegado con opciones a este sprint final gracias a su sensible mejoría en el presente curso. Tras un 2023 bastante discreto, hecho que, por otra parte, es normal teniendo en cuenta que empezaban de cero y que nunca habían jugado juntas, las alicantinas han subido considerablemente su nivel en la actual temporada. Han llegado a los cuartos de final de torneos Challenge en cuatro ocasiones. Esos cuartos de final se han convertido en una frontera insalvable. Las semifinales se han resistido una y otra vez.
¿Cuál es la mejor noticia para Liliana y Paula? Que están muy cerca de las canadienses, que son las decimoséptimas y últimas que, en la actualidad, irían a los Juegos de París vía ranking olímpico. ¿Cuáles son las noticias menos buenas? En este caso, dos. La primera es que sólo hay una plaza disponible. Un billete para seis dúos aspirantes. Y la segunda es que, de los dos torneos que quedan por celebrarse, sólo uno es Challenge, más asequible para soñar con, al menos, una semifinal.
En todo caso, si el próximo 9 de junio, cuando concluya el torneo Élite 16 de Ostrava, Liliana y Paula no han podido clasificarse a través del ranking olímpico, aún dispondrán de una oportunidad. La última, la definitiva. Es la final de la Nations Cup europea, evento que concede un último billete para los Juegos de París. Uno por cada sexo. Uno para una pareja europea masculina, uno para una pareja europea femenina. La fase final de la Nations Cup del viejo continente está prevista en Letonia entre el 13 y el 16 de junio. Por delante, tres semanas de auténtica locura.