Llegó el momento. Las Series Mundiales 2023-2024 de rugby seven alcanzan su momento culminante. Su resolución. Y el desenlace se escenifica en España. Después de siete episodios (en Dubái, Ciudad del Cabo, Perth, Vancouver, Los Ángeles, Hong Kong y Singapur), el gran evento de la modalidad olímpica del rugby aterriza en Madrid. Durante este fin de semana, la capital de España va a acoger tres jornadas de grandes emociones. Por una parte, los ocho mejores combinados nacionales, tanto masculinos como femeninos, tras las siete fases anteriores van a jugarse el título. Por otra, los cuatro peores conjuntos de las Series Mundiales (de la 9ª a la 12ª plaza en la clasificación) y las cuatro mejores selecciones de las Challenger Series (el segundo escalón internacional del seven) se enfrentarán para conseguir los cuatro billetes que aseguran la continuidad en la élite y, por tanto, para evitar las cuatro plazas que condenan al descenso. Y en esta lucha por la supervivencia están las dos selecciones españolas.
El Proyecto FER y el deporte valenciano tienen representación en los dos conjuntos. Como es habitual desde hace un tiempo, Enrique Bolinches forma parte del combinado masculino, mientras que María Calvo Balaguer ha sido convocada para jugar con la selección femenina. Ninguno de los dos equipos ha logrado evitar la lucha por la permanencia. Después de las siete Series desarrolladas en los últimos meses, de los 12 países participantes en cada sexo, la España masculina ha ocupado la 10ª plaza. Mientras, la España femenina ha finalizado en el 12º y último puesto. Es decir, ni ellos ni ellas han podido eludir las últimas cuatro posiciones. Por tanto, no pueden esquivar la agónica fase por la permanencia. En las Series anteriores, el mejor resultado de los chicos fue la cuarta posición alcanzada en Los Ángeles. Además, sumaron sendas octavas plazas (en Perth y Honk Kong). Las chicas, por su parte, a excepción del séptimo puesto en Vancouver, siempre han acabado últimas o penúltimas. O undécimas o duodécimas.
Los ocho combinados nacionales que van a luchar por seguir en la élite del rugby seven mundial se dividen en dos grupos de cuatro. En cada grupo, habrá dos selecciones de Series Mundiales (es decir, las que quieren evitar el descenso) y dos conjuntos procedentes de las Challenger Series (es decir, los que buscan el ascenso a la máxima categoría). Tras una liguilla de todos contra todos (de tres jornadas) habrá cruces en forma de aspa: el primero de un grupo contra el cuarto del otro, el segundo contra el tercero… Es decir, en total, habrá cuatro eliminatorias directas, a cara o cruz. Quien las gane, será selección de Serie Mundial. Quien las pierda, no estará en el principal escaparate del rugby seven internacional durante la próxima temporada.
La España masculina ha quedado encuadrada en el grupo B, con Samoa, Kenia y Chile. La España femenina, por su parte, jugará contra Japón, China y Polonia. Cabe recordar que el equipo masculino no concluye aquí su temporada. Todo lo contrario. En apenas tres semanas, entre el 21 y el 23 de junio, afrontará el momento supremo del año. Ni más ni menos, que el Preolímpico. Se celebra en Mónaco. Sólo el mejor de los 12 combinados participantes se llevará el billete olímpico para los Juegos de París. En suma, el rugby seven español se adentra en un mes de auténtico vértigo.