Caprichoso, el destino ha querido que la principal opción de medalla de la delegación FER en los Juegos Olímpicos de Tokio sea el último deportista en competir. Habrá que esperar hasta este sábado, 7 de agosto, para ver en acción a Sebastián Mora en el velódromo de Izu. El pistard castellonense y su inseparable Albert Torres forman una de las parejas aspirantes a todo en la madison, prueba de fondo consistente en dar 200 vueltas a la cuerda (50 km), y en la que se impone el dúo que más puntos acumula tras una serie de esprints. Mora y Torres se han ganado a pulso la consideración de candidatos al podio. Su colección de éxitos durante los últimos años les avala. Ahora, afrontan la gran reválida: entronizarse en los Juegos Olímpicos, el Everest del deporte mundial.
Bronce en el Campeonato del Mundo en Londres 2016, cuartos en el Europeo de Glasgow 2018, plata en el Mundial de Holanda 2019 y oro en el certamen continental de Bulgaria 2020. Son algunos de los triunfos acumulados durante este ciclo olímpico. Mora y Torres se han convertido en un dúo seguro, regular y solvente. En un valor muy fiable que se ha ganado el respeto de todos sus rivales. “Sabemos que la afición espera lo máximo de nosotros. Y estamos encantados. Más motivación. No es presión. Más bien, es responsabilidad. Y la asumimos con honor y naturalidad”, comenta Sebastián Mora.
El ciclista FER, de 33 años, ya fue olímpico en los Juegos de Londres 2012. En ese momento, disputó la persecución por equipos, en la que ocupó la sexta plaza. “No es comparable aquel precedente con los Juegos que voy a disputar en Tokio. Han transcurrido nueve años. Ahora, soy más experto, más maduro, más fuerte mental y físicamente”, señala el deportista de Vila-real, que llegó a la capital japonesa el pasado jueves 29 de julio. Durante las dos semanas previas, Mora y Torres prepararon, a conciencia, la participación en Tokio en el velódromo de Mallorca.
“Por ejemplo, hemos trabajado el cambio horario para llegar lo mejor posible. Nos hemos acostado muy pronto, en torno a las 10, y hemos madrugado mucho. A las 7 de la mañana, ya estábamos entrenando. Una de nuestras grandes ventajas es que los dos estamos a un nivel muy parejo. Hay otros tándems en las que uno de los dos componentes puede ser muy fuerte, pero, si el segundo flaquea, se produce un desequilibrio”, indica Mora. A la hora de evaluar a los principales rivales por el podio, el componente del Proyecto FER comenta que hay “muchos y muy buenos. Australia, Nueva Zelanda, Inglaterra, Italia, Francia, Dinamarca, Alemania… Va a ser una batalla, pero bonita y apasionante”, precisa el ciclista castellonense.
En suma, el deportista FER asume con valentía el reto de que el ciclismo en pista español vuelva a conquistar un podio olímpico 13 años después. Las últimas medallas en unos Juegos (un oro en puntuación y una plata, precisamente, en madison con Toni Tauler como compañero) las aportó Joan Llaneras en Pekín 2008. “Sería un honor tomar el testigo de una leyenda como Joan Llaneras tanto tiempo después. Vamos a por ello”, apunta Sebastián, quien concluye con su grito de guerra: GoTorresGoMora.