Unai Aguirre, Felipe Perrone, Alberto Munárriz, Roger Tahull, Marc Larumbe… Son algunos de los nombres que el pasado 3 de julio se proclamaron campeones del mundo de waterpolo. La selección española venció a Italia en la gran final y se entronizó en la piscina Alfred Hajos de Budapest, una instalación considerada, de forma oficiosa y simbólica, como la catedral del balonmano acuático. Un mes y medio después de aquella gesta, y con el recuerdo de la hazaña aún bien presente, un grupo de jovencísimos jugadores españoles van a intentar seguir el camino trazado por sus ídolos. Van a intentar emular a sus referentes. El combinado nacional sub-16 disputa en Grecia el Campeonato del Mundo de la categoría (21-28 de agosto). Y entre los 13 miembros del equipo español que va a afrontar el certamen mundialista, se encuentran dos embajadores del Proyecto FER: Samuel García Sales y Diego Ferrando Peiró.
La española es una de las 25 selecciones participantes en este Campeonato del Mundo de Grecia. Los 25 combinados se distribuyen en 8 grupos. Cada grupo (salvo uno, en el que hay cuatro) está formado por 3 equipos. En la fase inicial, España comparte cuadro con Brasil y Polonia. Los dos primeros de cada grupo acceden a los cruces de octavos de final. Samuel Garcia Sales (L’Eliana, todavía 15 años) y Diego Ferrando Peiró (Rocafort, 16 años) ya saben lo que es conseguir un gran éxito con el combinado español. En 2021, lograron la medalla de plata en el Campeonato del Mundo sub-15 (equivalente a la categoría cadete) celebrado en Portugal.
De cara al inminente certamen mundialista, Diego Ferrando se muestra optimista: “Aunque un Europeo siempre es durísimo, con selecciones tan potentes como Hungría, Serbia o Grecia, entre otras, creo que nosotros también somos un combinado muy fuerte y podemos optar a los puestos de honor. Estoy convencido de que no somos un rival deseable para nadie”. En términos muy similares se expresa Samuel García: “Aunque siempre tenemos que respetar a todos los rivales, confío en nuestra clasificación para los cruces finales, desde los octavos de final. A partir de ese momento, la competición ya adquiere otra dimensión con los partidos a cara o cruz. Ojalá lleguemos muy lejos, pero, en un torneo de tanto nivel, es imprevisible”.
A la hora de definir las características de la selección española, Diego Ferrando considera que el equipo nacional destaca por su defensa. “Aunque desconozco por completo al resto de rivales, diría que España será uno de los mejores equipos defensivos; sobre todo, en la variante de pressing. Dicho esto, también tenemos nuestras armas en ataque”, señala Diego. Samuel, por su parte, destaca el “equilibrio y la cohesión del combinado nacional. Somos un conjunto muy equilibrado y tenemos una gran ilusión”. Y añade: “Antes, para dominar la boya, valía con ser fuerte. Ahora, además, hay que ser rápido, saber defender, saber atacar… en definitiva, ser muy versátil y polivalente”, señala García Sales.
Como no podía ser de otra manera, los dos jóvenes deportistas del Proyecto FER vibraron con el oro alcanzado por la selección absoluta a principios del pasado mes de julio. Samuel, que juega de boya, tiene como ídolo a Roger Tahull. Diego, que actúa como lateral derecho, se inspira en Alberto Munárriz y Blai Mallarach. De cara a la próxima temporada, los dos waterpolistas valencianos seguirán jugando en el Club Nou Godella Natació. Además, formarán parte del programa de tecnificación de waterpolo desarrollado por la Federación de Natación la Comunitat Valenciana. Ahora, sin embargo, se impone el Mundial sub-16. Un reto apasionante. De por sí, por sus complexiones físicas, Diego y Samuel son dos gigantes. Ahora, buscan empezar a forjar sus particulares leyendas. Qué mejor lugar que Grecia.