En el momento justo. Cuando un apasionante mes de septiembre está a punto de abrir sus puertas, la jovencísima tenista Charo Esquiva (Bigastro, Alicante, 16 años) ha vuelto a mostrar su mejor versión. Este pasado fin de semana, la deportista del Proyecto FER se proclamó campeona de España en el Nacional junior de Reus. Charo es una de las grandes promesas del tenis valenciano, es cadete de segundo año y ello aporta un valor añadido a su golpe sobre la mesa en un torneo junior, en medio de una temporada plagada de retos. Su meta en Reus era clara: “ser campeona”. Así lo reconoce, no titubea. A base de una mejoría en la gestión de la presión por ser cabeza de serie, venció con contundencia, en dos sets, a la andaluza Lorena Solar en la final (6-2 y 6-2), y se adjudicó su tercer entorchado nacional consecutivo, tras los Campeonatos de España infantil y cadete de los dos años anteriores.
Charo Esquiva se ha rebelado. Durante ese 2024, ha caído eliminada en sendas primeras rondas de Grand Slam junior -en el Open de Australia, en enero; Roland Garros, en junio; y Wimbledon, el pasado mes de julio-, y ahora levanta el vuelo con un título nacional que le lleva de vuelta a sus mejores sensaciones antes de otra competición de altura. El próximo 1 de septiembre arranca el US Open junior y la alicantina entra directamente en el cuadro final, sin necesidad de disputar fase previa, por méritos propios.
En la retina, un 2023 con un salto de calidad más que notable. Siendo todavía cadete de primer año, ya jugó tres torneos de Grand Slam y llegó a octavos de final en París y Estados Unidos. Además, se adjudicó el ITF junior 500 de Offenbach, Alemania; fue campeona de España cadete individual y en dobles en Vic; se adjudicó el bronce en el Festival Olímpico de la Juventud Europea, en Eslovenia; y también se metió en cuartos del Campeonato de Europa de su categoría después de superar tres eliminatorias. Septiembre, además, aparece con más desafíos en el horizonte de Esquiva: afrontará el Europeo cadete en Parma, donde apunta a alcanzar las semifinales tras tocar aquellos cuartos en el último certamen continental.
Hay que tener en cuenta que solo poder entrar en Gran Slam junior es ya muy complicado, y he estado participando en el cuadro principal por méritos propios. Es verdad que el año pasado hice muy buenos resultados y que este año me he estancado un poco, pero sigo trabajando para ir a mejor. Este título es algo que me anima mucho a seguir mejorando.
Mi objetivo es seguir mejorando año tras año aunque a veces no me acompañen los resultados, y creo que eso lo estoy consiguiendo. Así que, como he dicho antes, sigo trabajando y aprendiendo.
Mi objetivo era subir al podio y ser campeona, por supuesto. Ningún torneo es fácil, pero sabía que partía como cabeza de serie número uno y que la presión podía jugarme una mala pasada. Cuando juegas un Campeonato de España, sabes que vas a enfrentarte a las mejores del país, y si a eso le sumas que soy todavía sub-16 y que hay jugadoras sub-18 muy buenas, hace que el torneo no sea fácil. Sabía que tenía que jugar al cien por cien.
El US Open es un torneo en el que participan las mejores del mundo sub-18, así que el poder jugarlo con mi ranking mundial ITF Junior es para mí un premio, aunque sé que es muy complicado obtener resultados. El Campeonato de Europa cadete es todo un reto, también. El año pasado ya conseguí llegar a cuartos de final y este quiero ir a por más.