La gimnasia rítmica y el ciclismo fueron las modalidades deportivas más productivas y fértiles durante el pasado fin de semana. Y en ambos casos, el protagonismo recayó sobre las féminas. Para empezar, Polina Berezina se convirtió en una de las grandes triunfadoras del Grand Prix de Thiais, en Francia. Aunque no era una Copa del Mundo, diferencia que, por ejemplo, se reflejaba en un menor número de participantes, este certamen es uno de los de mayor solera y tradición de la rítmica internacional. De hecho, en su nómina de competidoras, aparecía algún nombre ilustre. Si no de la élite, sí, de la clase media alta. Por ello, hay que valorar en su justa medida lo conseguido por Berezina.
Desde que arrancó la temporada, Polina se encuentra mucho más segura con el aro y la pelota. No tanto, con las mazas y la cinta. Así lo demostró en el Grand Prix de Marbella. Así lo repitió en la Copa del Mundo de Faliro, Grecia. Y así lo corroboró este pasado fin de semana en Thiais. En la jornada clasificatoria del sábado, la deportista FER encabezaba la general tras la ejecución de la pelota y el aro. En el ecuador de la competición, albergaba serias opciones de ascender al podio del all around. No obstante, sus opciones de medalla se diluyeron tras los errores cometidos en los otros dos aparatos. Al día siguiente, en la sesión de las finales, Berezina confirmaba su idilio con sus dos mejores ejercicios y lograba sendas medallas: oro en pelota, bronce en aro. El matiz de que no competía en una Copa del Mundo hay que tenerlo bien presente. No obstante, la progresión y la mayor fiabilidad de Polina son un hecho. Sólo falta que extienda esta solvencia a las mazas y a la cinta. Si lo consigue, la gimnasta FER puede pasar de la clase media alta a codearse, sin complejos, con las mejores. También, en Copas del Mundo. Por ejemplo, en la siguiente: Bakú, del 21 al 23 de abril.
Las dos medallas de Polina Berezina no fueron los únicos trofeos logrados por la delegación FER en Thiais. En la competición individual, Alba Bautista, una de las incorporaciones del FER 2023, se colgó el bronce en la final de pelota. Al igual que Polina, Alba es otra de las grandes esperanzas de la gimnasia española de cara a los Juegos de París. No son pocas las voces que transmiten un gran optimismo y apuestan por un escenario mágico: la presencia de las dos deportistas FER entre las 14 privilegiadas que obtengan el pasaporte olímpico en el Campeonato del Mundo de Valencia. El tiempo dirá. Mientras, el conjunto español, en cuyas filas se encuentran Patricia Pérez Fos y Mireia Martínez López, ascendía a un doble podio: tercera plaza en la clasificación general o suma de los dos bailes, segunda posición en la final del ejercicio de 5 aros. Por encima de los resultados propiamente dichos (también hay que considerar que combinados muy potentes no estuvieron presentes en Thiais), la mejor conclusión es la sensible mejoría experimentada por el equipo español con respecto a las flojas prestaciones ofrecidas una semana antes, en la Copa del Mundo de Sofía.
Gran balance en el Nacional junior y cadete de ciclismo en pista
La selección de la Comunitat Valenciana fue uno de los combinados triunfadores en el Campeonato de España junior y cadete de ciclismo en pista, evento desarrollado en Madrid este pasado fin de semana. Dos de las “responsables” de ese brillante balance para la delegación valenciana en el velódromo de Galapagar fueron las deportistas FER Daniela Grañana y Leyre Almena. En el torneo junior, la castellonense Daniela (16
años, junior de primer curso) obtuvo dos oros y dos platas en las cuatro pruebas individuales que disputó, resultados que se unen a la corona nacional alcanzada sólo dos semanas antes en el Campeonato de España de ómnium. Mientras, en la competición cadete, Leyre Almena (Valencia, 16 años, cadete de segunda temporada y una de las caras nuevas del FER 2023) hizo pleno de oros, cuatro modalidades y cuatro títulos: persecución individual, scratch, eliminación y puntuación. A finales de marzo, también se proclamó campeona en ómnium y madison.