Inmerso ya en su recta final, el año 2022 todavía tiene guardadas muchas emociones en su calendario deportivo. Por ejemplo, las que se van a concentrar en el Campeonato del Mundo de judo, uno de los grandes eventos previstos para el último trimestre del curso, y que se va a celebrar en Uzbekistán desde mañana, jueves 6, hasta el 13 de octubre. Las grandes estrellas de los tatamis están preparadas para demostrar su fuerza, su habilidad, su destreza, su concentración, su explosividad, su exuberancia física… Y, sobre todo, están dispuestas a sumar unos puntos preciosos en la carrera hacia los Juegos Olímpicos de París 2024. El Proyecto FER va a estar muy bien representado en el certamen mundialista gracias a Julia Figueroa y Salvador Cases. Hoy, nos ocupamos de la primera.
Julia Figueroa: “Un Mundial siempre es especial; se nota nada más llegar al lugar del evento”
Madurez, oficio, seguridad, solidez, madurez… La judoca nacida en Córdoba, pero formada deportivamente en la Comunitat Valenciana, atraviesa el mejor momento de su carrera deportiva. Está firmando una temporada de ensueño. De hecho, ha ascendido al podio en los cuatro torneos internacionales que ha disputado desde que arrancó el año. El último logro, la medalla de plata alcanzada el pasado 8 de julio en el Grand Slam de Budapest, hito con el que puso los primeros cimientos de su tercera participación olímpica.
Para Julia, de 31 años, el que arranca mañana en Uzbekistán será su quinto Campeonato del Mundo. Hasta el momento, sus dos mejores resultados han sido la séptima posición ocupada en Bakú 2018 y la medalla de bronce conquistada en el certamen universal desarrollado en Budapest el pasado año. Compite mañana, 6 de octubre.
Sin duda, más confianza y seguridad a la hora de competir. Estos buenos resultados son la demostración de que todo el trabajo físico, táctico, técnico y psicológico que estamos realizando es el adecuado. Vamos por el buen camino.
Sí, la experiencia siempre es un punto a favor, claro. Y, desde luego, ya tenemos un bagaje y unas tablas que nos ayudan. Con respecto a si estoy en mi mejor momento, puedo decir que me encuentro en un estado de forma muy bueno, pero espero que lo mejor esté por llegar.
Aunque intentas darle un aire de normalidad, es inevitable experimentar unas sensaciones especiales antes de un Campeonato del Mundo. Al final, un Mundial siempre es el gran objetivo del año. Y se percibe en el ambiente desde el primer momento en que llegas al destino que acoge el evento.
Por supuesto que lo soy. Obtener un tercer billete olímpico no será sencillo. Cada vez, hay más nivel, hay más competencia y hay rivales más fuertes. Pero me encuentro con fuerzas, con motivación y con ganas de ir a por ello.