Vuelve Quique Llopis. Ligeramente más tarde de lo que él mismo y todo su entorno hubieran deseado, pero regresa Quique Llopis. Uno de los principales activos del atletismo valenciano ya está listo para reencontrarse con la competición. El retraso en su reaparición ha respondido a razones ajenas a su voluntad. Ha obedecido a lo peor que le puede afectar a un deportista: una lesión. Llopis empezó su última travesía por el desierto en un momento especialmente sensible e inoportuno. En el mes de marzo, a muy pocos días del Campeonato del Mundo de pista cubierta en Belgrado, el vallista de Bellreguard sufrió un esguince de tobillo. Pese a la infiltración, compareció en el certamen universal, pero muy mermado de facultades. Conclusión: cayó eliminado en la primera criba y no pudo alcanzar el objetivo que se había trazado en su primer Mundial absoluto: acceder a las semifinales.
Aquella desgracia no hacía justicia a una excepcional pista cubierta. En enero de 2022, Quique Llopis empezó la temporada con un mejor crono de 7:69 en los 60m vallas. Dos meses más tarde, el deportista FER había rebajado su plusmarca personal hasta unos magníficos 7:56. Y lo que es más importante, había recuperado terreno con respecto a Asier Martínez. El valenciano volvía a cuestionar la hegemonía del navarro. Pero, además, aquella desgracia supuso el inicio de una etapa complicada. El esguince derivó en un doble edema óseo en el tobillo, dolencia que se ha prolongado más de lo deseable. Felizmente, y tras altas dosis de paciencia y resignación, el atleta de Bellreguard ya está en condiciones de competir. Comienza su lucha contra el reloj. Arranca su Operación Remontada.
Llopis, de 21 años, reapareció este pasado viernes en el segundo Trofeo Nacional de Gandia. Corrió los 110m vallas en 13 segundos y 75 centésimas, registro que todavía está muy lejos de su mejor marca de siempre al aire libre, los 13:41 establecidos hace ahora casi un año, el 19 de junio de 2021, en la Reunión Internacional de Madrid. “Ahora mismo, me encuentro en un 60%. Y todavía tardaré unas jornadas, o unas semanas, en alcanzar mi plenitud. Espero que ese momento no tarde mucho. Tendré que entrenar a tope para recuperar el terreno y el tiempo perdidos, y para llegar bien a los eventos importantes, a partir del Campeonato de España”, comenta el atleta FER, cuya hoja de ruta es la siguiente: la Final de la Liga de clubes (domingo 12 de junio), el Meeting de Madrid (18 de junio), el Campeonato de España en Nerja (25-26 de junio) y, muy posiblemente, los Juegos Mediterráneos en Orán, Argelia (principios de julio).
No obstante, toda la temporada está enfocada a los dos grandes eventos internacionales del verano: el Campeonato del Mundo (15-24 de julio, en Estados Unidos) y, sobre todo, el Campeonato de Europa (15-21 da agosto, en Múnich). “Soy optimista en ambos casos. Con respecto al Europeo de Múnich, no tengo ninguna duda de que lo conseguiré. La mínima es de 13:50. Es decir, es muy factible. Más difícil es la marca requerida para el Mundial, 13:32. No dispongo de demasiadas oportunidades para lograrla. El plazo acaba el 26 de junio. Hasta ahora, la preparación no ha sido la idónea a causa de la lesión, pero hay que intentarlo hasta última hora. En todo caso, si no consigo esa mínima de 13:32, siempre queda la opción del world ranking para acudir al certamen mundialista, y, por esa vía, tengo posibilidades” comenta, para finalizar, el discípulo de Toni Puig. Llopis vuelve a acelerar. Vuelve a saltar. Atentos todos.