Saltos de calidad. Pasos de gigante. Dos componentes femeninas del Proyecto FER se disponen a subir un nuevo escalón en sus carreras deportivas. Ambas han sido convocadas para sendos eventos de gran relevancia en sus respectivas especialidades. Por una parte, Irlanda Teresa Mira-Perceval figura en la selección que la Federación Española de tiro olímpico desplazará al Campeonato de Europa absoluto o dama en la modalidad de pistola de aire comprimido (Noruega, 18-26 de marzo). Por otra, Irene Ros Galeano va a poder disfrutar de su primera Copa del Mundo absoluta de gimnasia artística. Ejemplos de crecimiento.
A sus 20 años, Irlanda Teresa Mira-Perceval empieza a ser una de las referencias del tiro olímpico español. Durante el curso pasado, ya transmitió muy buenas señales en los Campeonatos de Europa y del Mundo junior. Ahora, nada más incorporarse a la categoría absoluta (también conocida como “dama”), la deportista de El Campello es una de las tres convocadas para afrontar el Campeonato de Europa. “Este era uno de los grandes objetivos de la temporada. Pero no, el único. También me planteo disputar alguna Copa del Mundo y el Campeonato del Mundo, previsto en Egipto para el mes de octubre”, indica Irlanda.
De cara al Europeo absoluto del mes de marzo, la tiradora del Proyecto FER no quiere marcarse un objetivo concreto. “No quiero auto presionarme y exigirme acabar en una determinada posición de las, aproximadamente, 70 competidoras que seremos. Lo que sí quiero es superar los 570 puntos. En el Europeo del pasado año, hubo empate a 570 puntos de la 20ª a la 24ª plaza. Y se entró en la final (las 8 primeras de la jornada clasificatoria) con 574 puntos. Es decir, 1 o 2 puntos de más o de menos te pueden permitir ocupar una plaza muy buena o te pueden condenar a posiciones más retrasadas. Por ello, mi gran reto es, repito, superar los 570 puntos. Hasta el momento, mi mejor marca es 572. Y el récord nacional está cifrado en 576”, explica Irlanda Teresa Mira-Perceval.
Mientras, hace pocas fechas, Irene Ros Galeano recibió un espectacular regalo de cumpleaños. Poco importa el ligero retraso entre el día de su aniversario y la recepción de la noticia. “El día 20 de enero, cumplí los 17 años. Cuatro jornadas después, me comunicaban que era convocada para mi primera Copa del Mundo en categoría absoluta, que se celebrará en Cottbus, Alemania, el último fin de semana de febrero. Y sí, aunque con una cierta demora, fue un gran obsequio”, comenta, todavía emocionada, la joven gimnasta del Proyecto FER.
Irene Ros es una de las grandes promesas de la gimnasia artística femenina en España. Así lo acreditó, por ejemplo, el pasado mes de diciembre, momento en que afrontó su primer Nacional absoluto. A pesar de ser una de las competidoras más jóvenes, se llevó la medalla de oro en el aparato específico de salto y ocupó la quinta plaza en el all around. Una caída en el último ejercicio, el de suelo, le privó de subir al podio en la clasificación general. Su progresión no pasa desapercibida. De ahí, su inclusión, junto con Alba Petisco, olímpica en Tokio, y Claudia Villalba, un año mayor que Irene, en la convocatoria para la Copa del Mundo de Cottbus. “En este evento, cada gimnasta puede hacer los cuatro aparatos. Todavía no sé cuáles haré. No hay all around. Y las ocho mejores de cada aparato en la primera rotación o fase clasificatoria accederán a las finales de cada ejercicio. Aunque, como siempre, intentaré dar lo mejor de mí, lo más importante es que ya empiece a entrar en la rueda de las grandes competiciones internacionales. Este tipo de eventos son vitales para adquirir experiencia y medirme con rivales del máximo nivel», indica la deportista FER.
Al margen de esta cita en Cottbus, Irene Ros ya se ilusiona con otros retos. Uno de ellos está muy próximo en el calendario. Entre el 17 y el 21 de marzo, se celebra otra Copa del Mundo en Alemania. En esta ocasión, en Stuttgart; y esta vez, por equipos. No obstante, “mis grandes objetivos del año están muy claros: formar parte del equipo español que dispute el Campeonato de Europa (en agosto, en Múnich) y el Campeonato del Mundo (en octubre, en Liverpool). Son las dos grandes citas de 2022 y en ellas me gustaría estar. Primero, por ser partícipe de estos acontecimientos tan espectaculares. Después, y, sobre todo, por empezar a ayudar a que la artística femenina española repita presencia olímpica en París, mi gran sueño”, concluye la joven deportista valenciana.