Un año. Una eternidad. Un mundo. 369 días después, Raúl Martínez se reencuentra con la competición.El taekwondista ilicitano, de 29 años, no estaba presente en un evento oficial desde el pasado 7 de diciembre de 2019, la imborrable fecha que acogió su clasificación para los Juegos Olímpicos de Tokio. En aquel momento, el deportista FER era todo felicidad y taquicardia. Felicidad por el hito logrado en Moscú. Y taquicardia por la angustia sufrida en las horas previas a la consecución del deseado pasaporte.
Después, llegó la pandemia y el aplazamiento de Tokio. Raúl ha sentido perplejidad por la gravedad de los acontecimientos. Ha experimentado resignación por el prolongado alejamiento de los tapices. Y ha tenido preocupación ante la incertidumbre de la celebración del evento olímpico.
Ahora, más optimista en cuanto a la disputa de los Juegos, se dispone a afrontar en Bosnia el Campeonato de Europa de pesos olímpicos, un certamen que no es de los más relevantes, pero que, con el actual escenario, ha adquirido una gran dimensión.
Espero que sí (risas). Tengo unas ganas tremendas de volver a pisar un tapiz para afrontar una competición oficial. Ha trascurrido un año desde mi última comparecencia, lo cual es una barbaridad. Más que un año, me parece casi una década. Lo dicho, una ilusión y una motivación tremendas.
Temo haber perdido ese feeling, esos automatismos, esos movimientos naturales, esa inercia, ese ritmo que te da la continuidad, que te dan las competiciones. Por mucho que te tomes cada entrenamiento a tope, un entrenamiento no tiene nada que ver con la competición, donde todo el mundo va con todo. Por contra, hace un año, cuando me clasifiqué para Tokio, tenía una lesión muscular. Ahora, estoy en perfectas condiciones y entreno con muy buenas sensaciones.
Mentalmente, con mucha ilusión de volver a competir. Como he dicho antes, nunca había estado tanto tiempo parado. En 2014, con la grave lesión de rodilla, estuve inactivo unos 6 o 7 meses, pero era por un motivo deportivo, no por las circunstancias actuales. En lo físico, ya llevo un tiempo entrenando bien, sin molestias, sin dolores, lo cual me hace estar feliz.
Sí, todavía no hay calendario. No es fácil, porque no podemos planificar, son todo incógnitas, pero hay que adaptarse e intentar pensar en positivo. Debemos seguir activos, y mantener la tensión y los entrenamientos.
Yo creo que, finalmente, se van a realizar. Todas las declaraciones que llegan desde Tokio y desde el Comité Olímpico Internacional van en esa dirección. Habrá más o menos público, habrá más o menos limitaciones, pero todo apunta a su disputa. Quiero pensar que, dentro de 8 meses, esta situación habrá mejorado. Ojalá se celebren y los Juegos de Tokio, que, de por sí, ya iban a ser espectaculares, se conviertan en una auténtica fiesta de la humanidad.
Además de Raúl Martínez, Daniel Ros y Javier Chicote
El Proyecto FER estará representado en este Campeonato de Europa de pesos olímpicos con sede en Bosnia por otros dos de sus taekwondistas. Por una parte, Daniel Ros(menos 87 kg), que no compite desde finales de febrero, cuando disputó el Open de Alemania. Por otra, Javier Chicote(menos de 80 kg, la misma categoría de peso en la que está Raúl Martínez). Chicote había empezado muy bien 2020 con una medalla de bronce en la Copa Presidente de Europa celebrada en Suecia.