En el regreso a los entrenamientos por parte de algunos deportistas del Proyecto FER, hoy se convierten en protagonistas deportes tan dispares como la halterofilia, el bádminton y el golf.
Halterofilia: Alba Sánchez
Aunque es un deporte individual, la halterofilia conlleva un contacto permanente con determinados utensilios y complementos, como las barras. Por ello, “cada vez que acabamos un entrenamiento, debemos desinfectar todo el material que hemos utilizado durante la sesión. Además, al ejercitarnos en un espacio cerrado, estamos obligados a usar mascarilla”, comenta Alba Sánchez. La deportista valenciana retomó su actividad en las instalaciones del Club Halterofilia Alzira el martes 26 de mayo.
La haltera FER está pendiente de saber si, finalmente, podrá disputar o no su gran cita del curso, el Campeonato de Europa sub-23 en Finlandia, a mediados de septiembre. Tengo depositadas muchas esperanzas en este evento. Quiero quitarme la espina del pasado año, cuando no pude obtener el resultado que esperaba. Ojalá se pueda celebrar. Aunque albergo mis dudas, yo estoy entrenando como si tuviera la absoluta certeza de que se va a desarrollar”, señala la levantadora alcireña.
Alba Sánchez revela su fórmula para mantener la motivación. “Cuando estoy frustrada por las dudas a corto y medio plazo, recuerdo cómo estábamos hace apenas dos meses y me tranquilizo. Tenemos que seguir entrenando al máximo nivel y conservar la forma. Una desmotivación ahora puede ser muy perjudicial para cuando volvamos a competir. Esperemos que sea más pronto que tarde”, indica.
Bádminton: Francisco Javier Olivares y Carlos Sánchez-Alarcos
Los dos mejores jugadores de bádminton de la Comunitat Valenciana volvieron a pisar el Centro de Tecnificación de Alicante, su habitual lugar de entrenamiento, en la última semana de mayo. Como en el resto de modalidades que se desarrollan en espacios cerrados, los deportistas han de someterse a un estricto control, a unas normas muy rigurosas. “Nada más levantarnos, antes de acudir al entreno, hemos de cumplimentar y rellenar un formulario en el que indicamos nuestra frecuencia cardiaca, nuestras pulsaciones y nuestra temperatura. Al llegar a la instalación, entregamos este formulario, se nos vuelve a tomar la temperatura, desinfectamos las zapatillas y nos lavamos las manos con gel hidroalcohólico. Además, cada uno de nosotros tiene un bote de volantes asignado, no lo podemos intercambiar. Y en los vestuarios, sólo podemos cambiarnos, no ducharnos. Este es, de momento, nuestro día a día”, explica Carlos.
Ambos deportistas cumplen en 2020 su segundo año en la categoría absoluta. Antes de la irrupción de la pandemia del covid-19, ya habían empezado a disputar torneos en el extranjero. No obstante, “nuestro principal objetivo durante esta temporada no era otro que intentar, cuanto menos, llegar a la final de dobles del Nacional absoluto. Ahora, toda la competición nacional de este curso ya ha finalizado. Se ha suspendido. Y estamos a la espera de que reconfiguren el calendario. Si todo va bien, es posible que en septiembre podamos volver a jugar algún torneo”, apunta Olivares. Con respecto a sus objetivos inmediatos y al corto plazo, ambos se centran en “mejorar aquellos detalles técnicos en los que, durante la temporada, con tanto partido, no podemos incidir. Me refiero a aspectos tanto de movimiento, como de golpeo”, señala Sánchez-Alarcos.
Golf: Sara Teresa Sarrión
Favorecida por las características de su deporte, la joven Sara Sarrión retomó el golf a mediados de mayo, coincidiendo con la incorporación de la Comunitat Valenciana a la fase 1 del proceso de desconfinamiento. Sara se ejercita en el Club Escorpión de Bétera. “Sólo puedes quitarte la mascarilla cuando te incorporas al campo, al entrenamiento propiamente dicho. Antes, nada más llegar, te toman la temperatura. Además, has de reservar turno y hora con antelación. Hay un máximo permitido de personas por hora reservada. Y los carros son permanentemente limpiados y desinfectados”, cuenta Sara.
La deportista FER ya tiene un poderoso argumento para estar muy motivada: la disputa, durante el último fin de semana de julio, del Campeonato de España absoluto en el Club de Golf Escorpión de Bétera, “el campo en el que entreno día a día. Entre que será el primer torneo después de la pandemia, y entre que se celebra en mi segunda casa, es fácilmente imaginable la ilusión que me genera este acontecimiento”, expresa Sara, firmemente comprometida en mejorar las prestaciones y resultados en 2019. “Superado el periodo de confinamiento, estoy ya preparada para los próximos retos. Quiero ser mejor jugadora cada día, potenciar mis virtudes y vencer mis debilidades”, expresa Sara Sarrión.