Dos jóvenes componentes del Proyecto FER se disponen a afrontar, en pocos días, sendas grandes citas internacionales. Por una parte, Sonia Pereira (Ribarroja del Túria, 21/12/2001) disputará en Chile el Campeonato del Mundo junior de karate. Para Sonia, será su principal torneo del año. Además, con este evento, pondrá punto final a su paso por la categoría junior. Por otra, Gonzalo Suárez Pérez (L’Alfàs del Pi, 05/01/2002) viaja hasta Croacia para competir en el Campeonato del Mundo sub-21 (aunque también habrá una clasificación parcial para los sub-19) de vela clase laser standard, clase olímpica. Será del 28 de octubre al 2 de noviembre. A escasos días de participar en certámenes del máximo nivel, y con las maletas cargadas de nervios, ilusión y motivación, Sonia y Gonzalo nos han cuentan sus sensaciones y expectativas.
Sonia Pereira: “Claro que podemos ilusionarnos con un podio en el Mundial”
Claro que podemos ilusionarnos con, cuanto menos, subir al podio. Me encuentro en buen estado de forma y con una gran motivación. Con respecto a la comparativa entre una Liga Mundial y un Campeonato del Mundo, claramente hay más nivel en el Campeonato. No obstante, la Liga Mundial de Monterrey reunió una buena participación. Superé a rivales de entidad. De ahí, mi optimismo.
Como he comentado antes, tengo muy buenas sensaciones. Físicas y mentales. Me faltaba un gran resultado para ganar en seguridad y confianza. En estas semanas y días previos a un Campeonato del Mundo, ya sólo has de pulir y mejorar pequeños detalles. El trabajo principal ya está hecho desde hace tiempo.
Con las máximas aspiraciones. Aunque en el Campeonato de España debuto como sub-21 y, por tanto, seré de las más jóvenes, cuento con precedentes favorables. En las últimas pruebas de la Liga Nacional, he ganado a algunas de las rivales que me encontraré en Talavera. Por tanto, me veo con serias opciones de lograr un gran resultado.
Gonzalo Suárez: “En este Mundial, quiero disfrutar, aprender y progresar”
Más aprendizaje, sin duda. En realidad, más que sufrimiento, en el Europeo de Polonia de agosto, lo que comprobé fue la dureza y la exigencia propias del máximo nivel. Era primer gran evento internacional y lo noté. Aunque los resultados no fueron del todo buenos, la experiencia fue satisfactoria y enriquecedora. Lo que más aprendí fue en aspectos como el trimado del barco y la táctica de regata.
Sinceramente, no. No quiero obsesionarme con objetivos previos. Por supuesto, quiero estar lo más arriba posible y mejorar los resultados logrados en Polonia. Pero, como imagino que el nivel será igual o más alto que en el Europeo, me planteo disfrutar, aprender y progresar. Además, hay que tener en cuenta que volveré a ser de los más jóvenes.
Siempre he preferido mucho viento. Cuanto más complicadas son las condiciones, creo que mejor rindo.