Mejor estreno, imposible. El paratriatleta Héctor Catalá firmaba este fin de semana el debut soñado como integrante del Proyecto FER y prolongaba su particular estado de euforia. Desde mediados de agosto, se suceden las buenas noticias para el deportista natural de Serra. Primero, con la decisión del Comité Paralímpico Internacional de incluir su prueba, la PTV1 (discapacidad visual), en la agenda de competiciones de los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. Después, y como consecuencia directa, por su incorporación al Proyecto FER. Y, por último, por la fantástica medalla de bronce lograda el pasado sábado en el Campeonato del Mundo de Gold Coast, Australia. Un excepcional resultado que minimiza la decepción sufrida en el Europeo de Estonia, celebrado el pasado mes de julio, y que le consolida en la élite del paratriatlón internacional. Y todo ello, tras llevar apenas 3 semanas con su nuevo guía, el gallego Gustavo Rodríguez. Un hecho casi inaudito. Horas después de su logro, estas son sus reflexiones.
Hasta el momento, llevabas un oro y una plata en Campeonatos de Europa, y un bronce en Campeonatos del Mundo. En comparación con los anteriores, ¿sabe mejor este éxito?
Sin duda. Este bronce del pasado sábado tiene más valor para mí. De todas las competiciones internacionales que he disputado durante los últimos años, este Mundial ha sido el de mayor nivel y exigencia. Además, he estado más cerca que nunca de los rivales que han sido oro y plata, dos deportistas de una enorme categoría. Dicho esto, y reconociendo que estoy satisfecho, quiero más para el próximo año.
¿Afrontabas este Campeonato del Mundo con más motivación e ilusión por saber que tu prueba, por fin, forma parte del programa de los Juegos Paralímpicos de 2020?
Por supuesto. Ha sido un Campeonato del Mundo muy especial. La incorporación de mi categoría a los próximos Juegos le concede a mi prueba y a mi actuación una mayor repercusión. Además, en cierto modo, he visto recompensada la apuesta que hice hace dos años de centrarme en el deporte a un nivel más serio y profesional.
¿Esta medalla de bronce nos permite soñar con un podio en los Juegos Paralímpicos de Tokio?
Es toda una inyección de optimismo y de confianza, pero cada prueba es un mundo. Todavía quedan 2 años para que llegue Tokio. Creo que aún tengo margen de mejora y que puedo progresar, pero estamos en el máximo nivel y en la élite mundial, y hay que ser prudentes.
Defínete como paratriatleta. ¿Eres especialista en algún segmento en especial? ¿O eres bastante equilibrado en los 3 sectores?
Me gustan mucho los 3 segmentos, no creo que sea ni mejor ni peor nadando, pedaleando o corriendo. Considero que soy bastante regular y equilibrado en las tres especialidades (al respecto, he de agradecer el trabajo de mi entrenador, de Jordi Jordá). Creo que mi punto fuerte es mi constancia y el trabajo diario.