No siempre no alcanzar una meta es sinónimo de decepción o, incluso, de fracaso. En ocasiones, quedarse a las puertas de un logro también puede ofrecer conclusiones positivas. Quizás, no de forma inmediata, pero sí con el paso de las horas o de los días. Este diagnóstico es perfectamente aplicable a algunos deportistas FER tras el capítulo vivido este pasado fin de semana. Especialmente, a Manu Bargues, protagonista en el evento más importante de las últimas jornadas, el Campeonato de Europa absoluto de esgrima en Serbia. El tirador FER, de 23 años, ha estado bien cerca de firmar toda una gesta. Tras una correcta poule o liguilla inicial (3 victorias, 3 derrotas), Manu se agigantó con la llegada del momento de la verdad, los asaltos directos. Siempre de forma apurada, se impuso en las 3 primeras eliminatorias. Así, se plantó en los octavos de final, entre los 16 mejores, un resultado que ya superaba su actuación del pasado año en este mismo certamen. En el asalto para pasar a cuartos, para colarse entre los 8 elegidos y para soñar con el podio, Bargues cayó como antes había ganado: por la mínima, por un solo tocado, 15-14, frente a un rival finlandés. Un despiste resultó letal. Al final, 16ª plaza entre los 115 participantes. Y el mejor de los 4 españoles presentes en el Europeo. Una fantástica actuación que refleja el crecimiento del tirador FER.
El segundo de los deportistas FER que experimentó una mezcla de sensaciones, buenas y no tanto, durante este fin de semana ha sido Pablo Torrijos. El triplista castellonense completó en Soria, sede de la final de la División de honor de clubes, el mejor concurso de su vida deportiva al aire libre. De los 6 saltos ejecutados, 3 resultaron deslumbrantes: 16,90, 16,99 y, sobre todo, 17,02m. Una serie para enmarcar. Hacía 3 años que Pablo no superaba la mágica frontera de los 17m. Lamentablemente, los tres grandes brincos de pasado sábado en Soria llegaron con viento ilegal. Por tanto, no serán homologados. No obstante, queda la sensación de que Pablo está en el buen camino de cara al Europeo de Berlín del próximo mes de agosto. Torrijos y Daniel Andújar, segundo tras una valiente carrera en los 800m, contribuyeron al décimo título nacional consecutivo del Playas de Castellón en la final de la liga de clubes. Una victoria no apta para cardiacos y que se resolvió en la última prueba. Más cómodo fue el triunfo, el enésimo, del Valencia Esports en la final femenina. Fátima Diame ganó el triple salto y lo hizo, de nuevo, con una marca apreciable: 13,88. Además, con viento legal. Volvió a rozar los 13,90m exigidos para viajar a Berlín.
El fin de semana también ha dejado alegrías categóricas. Sin resquicios para las lamentaciones. Las jóvenes María Añó y Noa Ros ratificaron que son dos diamantes en bruto. Ambas deportistas FER participaban en un Torneo Internacional de gimnasia rítmica en Bulgaria. Obviamente, el evento no tenía ni el nivel ni la calidad de un Campeonato de Europa o del Mundo. No obstante, constituía un test de calidad. Y las dos lo superaron con brillantez. Entre las 20 competidoras en total, María se proclamaba campeona y Noa, subcampeona. Otra fantástica noticia para las dos componentes del club Mabel de Benicarló, quienes hace pocos días recibían una enorme alegría. La Federación las ha situado en la categoría absoluta honor, junto a Polina Berezina, en el Campeonato de España de la próxima semana en Guadalajara. Otra buena noticia llegaba desde el vóley playa. Liliana Fernández ganaba la prueba de la Eredivisie Beach celebrada en Eindhoven, un torneo menor, pero que refleja la evolución de Liliana y su compañera Elsa tras el parón del pasado año. También en territorio foráneo competía Roberto Sánchez Mantecón. El deportista de Manises disputaba en Amberes, Bélgica, una nueva Copa del Mundo de triatlón distancia sprint. El certamen reunía 65 triatletas. Roberto ocupaba la plaza 27ª. Acusaba un resfriado sufrido en los días previos y, por qué no decirlo, el altísimo nivel de la prueba y de sus rivales.
Mientras, fiel a su excelente balance de cada ejercicio, el Campeonato de España de clubes de natación paralímpica ha deparado una auténtica lluvia de medallas y podios. En total, entre los 7 nadadores FER presentes en la pista de Lloret de Mar, el botín ha ascendido a 20 medallas de oro. El emergente Sergio Martos lograba 4 oros y una plata en la categoría S8. Los consagrados José Antonio Marí y David Levecq acumulaban 7 victorias en otras tantas pruebas: 4 para Marí y 3 para Levecq. Por lo que hace a la participación femenina, Ariadna Edo conseguía 3 oros; Eva Coronado ganaba las 3 disciplinas que disputada; Ana María Martínez Rolania se proclamaba campeona en la prueba de los 100m braza SB9; y Delia Fontcuberta, una de las novedades del FER 2018, se llevaba 2 oros en la categoría de discapacidad S6. En dos meses, Edo, Coronado, Marí, Levecq y, muy posiblemente, Martos afrontarán el Europeo absoluto en Dublín. Por último, en judo, el joven alicantino Pedro Gómez Llorens, todavía en edad cadete, se adjudicaba la Súper Copa de España junior celebrada en Cáceres.