Aunque geográficamente Rio de Janeiro quede en las antípodas de la Comunitat Valenciana, hay deportistas valencianos que se encuentran muy cerca de la ciudad brasileña. Son aquéllos que ya han asegurado su participación olímpica en los Juegos de 2016. Los hay, también, que se sitúan en la equidistancia física con respecto al país carioca. A mitad camino entre visitarlo o no. A medias entre embarcarse hacia el continente americano o quedarse en tierra. Uno de los mejores ejemplos de tal disyuntiva es la ciclista Anna Sanchis. Su pasaporte olímpico va íntimamente ligado a la suerte que corra el ciclismo femenino español a nivel internacional. En la actualidad, la selección femenina nacional se encuentra provisionalmente clasificada para la cita del próximo verano en Rio. En este momento, el combinado español ocupa la plaza 20 del ranking UCI (Unión Ciclista Internacional). Pero el corte está situado en el puesto 22. Es decir, la línea que separa la alegría de la decepción es muy fina. Casi imperceptible. El plazo para seguir acumulando méritos y para conocer los equipos afortunados expira el 31 de mayo. A día de hoy, dos ciclistas españolas participarían en Rio. Y posiblemente, Anna Sanchis sería una de las escogidas.
Si tuvieras que apostar por la presencia o la ausencia del ciclismo femenino español en los Juegos de 2016, ¿cuál sería tu apuesta?
Favorable. Si no nos pasa nada extraño, si no tenemos una epidemia de lesiones, soy optimista. Somos un grupo de 4 o 5 chicas que estamos a un buen nivel y que, en mayor o menor medida, siempre puntuamos en las diferentes pruebas que disputamos. Por tanto, apuesto por nuestra participación en Rio.
Dada la clasificación tan apurada en el ranking UCI, habrá que seguir remando y luchando hasta finales de mayo. ¿Qué pruebas vais a disputar para conseguir más puntos?
Aunque el calendario no está plenamente definido, las principales pruebas que reparten más puntos de cara a la carrera olímpica son la Emakumeen bira vasca, diferentes citas de la Copa del Mundo y una ronda por etapas en la República checa.
Si finalmente el ciclismo femenino español se clasifica, lo normal es que fueran dos representantes. ¿Te ves como una de ellas?
Quiero pensar que sí. Yo me veo con opciones. No es que me considere favorita ni por delante del resto de aspirantes, pero creo que tengo posibilidades. Además, me dicen que el tipo de circuito en Rio se ajusta bastante a mis características.
¿Cómo es el circuito de la prueba olímpica, qué referencias te han dado?
Me han comentado que es durísimo. Una emboscada permanente. Me dicen que es el trazado más exigente que nunca ha habido ni en Campeonatos del Mundo ni en otras ediciones olímpicas. A mí me gustan estos recorridos. Otro aliciente más para luchar por conseguir la plaza para Rio 2016.
Por último, ¿cómo te encuentras? ¿Será posible que la salud te respete por fin ahora que te estás jugando algo tan importante como volver a ser olímpica 8 años después?
Yo me encuentro muy bien. Tanto mental como físicamente. Solo deseo que la suerte me acompañe, y que las lesiones y las enfermedades dejen de cebarse conmigo. Si eso ocurre, estoy casi segura de que haré un buen año y de que estaré en los Juegos de Rio.